¿Es posible separarte de tu pareja sin pelear?
Sí, pues como se suele decir, dos no pelean si uno no quiere. Toda ruptura sentimental, separación o divorcio es desagradable, pero parece que estamos demasiado acostumbrados a pelear y casi que contamos con que una pareja en el momento en el que opte por la ruptura, tendrá un enfrentamiento, pero realmente no es así necesariamente y se trata de una mala gestión emocional de la relación.
Somos seres racionales y por ello debemos de tratar de entender y aplicar conductas racionales, de manera que una relación debe de nacer del libre y concurrente consentimiento y decisión de los dos miembros de la pareja y debe de terminar con la separación cuando alguno de ellos así lo desea y decide.
Hay que facilitar las cosas y no entorpecer la ruptura pues en definitiva se estará alargando un dolor y sufrimiento que no nos lleva a ningún sitio bueno, pues supone el enfrentamiento innecesario de dos personas que pudiendo llevarse bien acaban en un divorcio con peleas, enfrentamientos y disputas que sólo les causarán daño a ellos y sus seres queridos, especialmente a los hijos, de existir.
Es posible separarse de una pareja, marido o mujer sin pelear, nosotros así lo intentamos en nuestro despacho de abogados tratando de facilitar el acuerdo amistoso y reducir la tención, dramatismo y enfrentamiento de las rupturas sentimentales y crisis familiares: Separaciones y divorcios.
Divorcio sin pelear:
Parece que la palabra divorcio y pelear van de la mano. Incluso la palabra matrimonio y pelear, pues tenemos gran tolerancia a los enfrentamientos en pareja. A pesar de ello, no debería de ser así, pues un divorcio sin pelear debería ser lo normal u el ejemplo social en el que se refleje cualquier persona en un proceso de familia para que cada vez sea más minoritarios los casos en los que un matrimonio o relación de pareja acaba en litigio.
Se trata de un auténtico fracaso para abogados y cónyuges el hecho de que un matrimonio finalice con un enfrentamiento, pues no se habrán sabido gestionar las habilidades de entendimiento.
Muy importante debe de ser lo que se está disputando para que merezca la pena entrar en un proceso de divorcio contencioso. Podemos entrar en un juicio de divorcio por motivos de peso, como pude ser la discrepancia en la custodia de los hijos o cuestiones esenciales e importantes.
A pesar de ello, en muchos casos las partes pelean por cuestiones materiales sin valor real que merezca la pena litigar, pues en ocasiones es contraproducente. Son muchos los pleitos de familia que se gestionan por revanchismo y rabia, pero que objetivamente, sopesados en frio, no merecen la pena por sus costes económicos, temporales y desgaste personal.
En muchos pleitos algunas partes gastan más en abogados y procuradores que lo que está en juego y pueden ganar, por ello, es importante un divorcio sin pelear y sin tensión para que se pueda normalizar un divorcio saludable que simplemente consiste en un proceso necesario que se tramita entre personas adultas que por encima de todo pretenden buscar soluciones que en el plano individual y conjunto puedan satisfacer a las partes.
¿Cómo separarte de tu pareja sin pelear? De mutuo acuerdo.