El divorcio de mutuo acuerdo es aquel que se gestiona de manera amistosa por ambos cónyuges que prestan su consentimiento tanto en la tramitación del divorcio como en la aprobación del convenio regulador.

Un matrimonio comienza por la concurrente voluntad de ambos miembros de la pareja. En cambio, el divorcio requiere la petición de uno de los cónyuges si es divorcio contencioso, pero de ambos si es de mutuo acuerdo.

Es muy importante saber cuando divorciarse test o reflexiones que nos puedan ayudar a tomar la decisión.

Una vez que tomemos la decisión enfocar nuestros esfuerzos en potenciar la cordialidad y ojalá llegar a un mutuo acuerdo amistoso.

Para ello será imprescindible contar con el asesoramiento de un abogado de familia que sepa delimitar los derechos y obligaciones de los cónyuges y realizar la recomendación que sea más ventajosa, no sólo para el cónyuge que recibe la consulta sino todos los demás miembros de la familia.

Desde el momento en el que uno de los cónyuges quiere o necesita el divorcio, el otro debería de aceptar que no puede retener a la que ha sido una relación sentimental y que ha dejad de querer compartir su proyecto de vida común.

Partiendo de esa base, desde el momento en el que uno traslada la necesidad del divorcio al otro cónyuge, ambos deberían de propiciar un ambiente de mediación respetuoso en el que llegar a los mejores entendimientos que se transformen en un convenio regulador de divorcio de mutuo acuerdo que pueda equilibrar de una manera justa los derechos y obligaciones de los cónyuges.

Cuando el divorcio es necesario, siempre será más saludable gestionarlo de mutuo acuerdo, pues será más rápido, económico y cordial.

Puede consultar a nuestros abogados matrimonialistas para conocer su situación legal, tanto de manera conjunta como individual.