Para terminar una relación de pareja con una persona que no quiere lo más importantes es ser muy claros y no dejar dudas o la puerta abierta a mantener la relación, pues al no querer la ruptura, la otra persona tenderá a aferrarse a cualquier esperanza de retomar la relación.
Cómo dejar a tu pareja viviendo juntos
Una dificultad añadida es dejar a una pareja cuando existe una convivencia y por tanto nuestra decisión no sólo genera problemas a nivel afectivo y relacional, sino también de organización de vida, pues es evidente que desde que se comunica la ruptura, hay que adaptar el cese de la convivencia a las circunstancias, pero se trata de una dificultad añadida.
Dejar a un apareja viviendo juntos supone un cambio de residencia de uno o ambos esposos.
Habrá que valorar cuál es la situación legal y cuál es la mejor opción en la pareja que termina.
Hemos de destacar que en lo que se refiere a atribución de derecho de uso, en los casos en los que existen hijos comunes, la preferencia es la atribución correlativa al régimen de custodia. En defecto de hijos se valora titularidad de propiedad y en su caso cuál es el más vulnerable de los miembros de la pareja o cónyuges.
Convivencia en propiedad común hipotecada:
Este es uno de los casos más frecuentes y complicados. Con independencia de qué miembro de la pareja se queda en la casa los gastos derivados de la propiedad se deben de pagar en función del porcentaje de propiedad, sea por mitades u otro.
Se trata de los gastos de IBI, comunidad extraordinaria (derramas) e hipoteca.
Existirá una opción temporal de atribución de uso del domicilio y una definitiva de división de la cosa común, ya sea por la compra de uno del porcentaje del otro o por venta a tercero.
Convivencia en propiedad de uno solo:
En el caso de que la convivencia se haya realizado en la vivienda de uno sólo de los esposos, esté tendrá preferencia en lo que se refiere a la atribución del derecho de uso. Ahora bien, como ya hemos dicho, en los casos en los que existen hijos comunes, la preferencia de atribución del derecho de uso será para los niños y el progenitor custodio.
Convivencia en piso de alquiler:
En el caso de piso de alquiler será muy importante tener en cuenta si el contrato está a nombre de uno u otro de los miembros de la pareja. Lo mismo ocurriría si la vivienda fuera de una tercera persona y lo estuviera diciendo en precario.
La preferencia de derecho de uso, en caso de rupturas de pareja y divorcio sin hijos, será aquel del que proceda el derecho, esto es la persona a nombre de quien este el contrato de alquiler o a quien el propietario ceda el uso (el familiar del propietario, hijo, hermano, nieto… etc).
https://divorcionetas.com/divorcio-sin-hijos/
Cómo romper una relación con alguien que quieres
A la pregunta de, cómo romper una relación con alguien que quieres, habría que preguntarse antes si realmente se quiere mantener la relación o en su caso la ruptura.
Es muy diferente querer a nuestra pareja y querer la relación con nuestra pareja. Y dentro del sentimiento de querer a nuestra pareja deberemos de diferenciar si le queremos como pareja o simplemente como una persona que ha sido o incluso sigue siendo importante en nuestra vida.
Se puede dejar una relación sentimental o matrimonio con una persona que queremos, pero en cambio, hemos dejado de querer mantener la relación como pareja. Es normal querer a alguien que ha sido o es nuestra pareja, pero será muy complicado separar el querer como persona y como pareja.
Romper con alguien que quieres, una vez tomada la decisión y descartada la posibilidad de mantener la pareja, se debe de realizar con sensibilidad y respeto.
Es una situación muy desagradable y triste pues decirle a alguien que quieres que no quieres estar con él puede ser un verdadero trauma. Por ello, lo mejor es ser muy claros, muy empáticos, pero no titubear en la decisión, pues puede suponer un dolor añadido para la otra persona y para nosotros.
Es muy diferente darse un tiempo, dejar la relación de manera temporal o una ruptura definitiva, es por ello que esa cuestión se debe de dejar especialmente clara a la otra parte.
Cómo terminar una relación sin herir a la otra persona
En ocasiones es imposible dejar una relación sin herir a la otra parte, pues es un dolor inevitable. Lo que si podemos reducir en gran medida es el sufrimiento.
Las relaciones sentimentales suelen comenzar muy bien y las personas se acostumbran a esa situación como si fuera algo que va a durar para siempre. Idealizar una relación sentimental la puede poner en peligro, pues puede llevar a la falsa sensación de que no va a acabar y tiende a hacer que algunas parejas dejen de atender y cuidar la relación, lo que acaba provocando un deterioro que se podrá haber evitado.
Es muy importante para terminar la relación sin herir no remover lo malo, no buscar culpables, no victimizar ni entrar en cuestiones que inevitablemente van a hacer daño. Ser muy claros y tratar de mantener una situación de certidumbre en la medida de lo posible.
Cómo terminar una relación que no funciona
Para terminar una relación que no funciona, en resumen, lo que debemos de hacer es tratar de gestionar la situación de la manera más saludable posible. No es fácil, pero tal vez, entre todas las opciones, tratar de adaptarlo a la menos mala.
Como se suele decir, hay que intentar tratar a las personas de la manera que nos gustara que nos trataran a nosotros mismos.
No debemos de engañarlos, es un momento malo y triste, pero ni restarle importancia ni dramatizar aún más. Tratar de enfocarlo con cierta normalidad, verlo como una fase de la vida de ambos y darse cuenta que si una relación no funciona, debe de detenerse a tiempo de que la tensión crezca y la situación se torne insostenible.